¡Hola a todos!

Ya hemos despedido Julio y comenzando las merecidas y apreciadas vacaciones, me voy no sin antes, dejaros este post que necesitaba publicar, no tiene nada que ver con lo que he publicado anteriormente, y de hecho no sé si os gustará, ya que no suelo hablaros de "mis ídolos" está claro, puede que no tenga el éxito de los últimos post, y sé que para gustos colores, pero llevaba tiempo queriendo hablaros de esta mujer ¡única!.

marina-abramovic Marina Abramobic, es una artista que hace performances desde hace más de cuarenta años, si veis sus obras sin saber el significado, podríais creer que está loca, pero todo lo contrario, es una artistaza, con una mente privilegiada, con una fuerza y paciencia infinita, y de verdad me gustaría que dedicarais sólo 3 minutos y medio a ver el video que os voy a mostrar más adelante. Me apetece mucho compartir ésto con vosotras/os.

Llevaba años siguiendo a esta artista, que me inspira, de verdad, me inspira, me absorve, que obnubila, es un poco retorcida, pero cada video, cada obra suya que he visto, me ha llegado, incluso me han afectado tanto, que he llegado a llorar, a reir, me he enfadado, me he desahogado y en ocasiones, hasta el corazón se me encoje cuando pienso en alguna de ellas...

La empecé a seguir porque ha expuesto algunas de sus performances y video-instalaciones en diversos museos alrededor del mundo y en alguna ocasión en el MoMa de Nueva York. En 2008 estando yo en NY, vi que se anunciaba una de sus exposiciones (que nada tenía que ver con la que hizo dos años después y de la que os hablo enseguida), me llamó la atención pero no pude ir, ya que la hacía una semana después de mi vuelta a España... mi gozo en un pozo.

Un año y medio después en 2010 Marina hizo una exposición de nuevo en el MoMa de NYC que se llamaba "The Artist is Present". En esta ocasión, mi prima la vio personalmente allí. (Porque Marina casi siempre está presente en sus exposiciones) Esta exposición era un recopilatorio de todas sus obras, mi prima María me lo contó maravillada, alucinó con cada obra expuesta, desde la caravana donde vivió cinco años con su expareja Ulay, hasta un video en el que se gritaban el uno al otro durante diez minutos para acabar exahustos, ella me decía que si hubiesemos estado allí las dos, nos hubiesemos quedado a vivir en el museo hasta que la exposición terminase...¡¡ y yo no lo dudo!! De hecho expondrá este año en España y no pensamos perdernos la oportunidad de verla yo ¡por fin! y mi prima por segunda vez, ¡en persona!

A partir de ahí, empecé a buscar más e investigar sobre ella. De verdad, quedé aún más fascinada si cabe, al saber como había sido su vida, viviendo en una caravana, duchándose en gasolineras, ordeñando cabras para conseguir comida, y luego su relación con Ulay, llena de infidelidades por ambas partes y reconciliaciones, los dos, pareja artística y sentimental.

Marina, es una mujer que lleva el arte al extremo, se ha rajado el vientre con cuchillas, ha comido cebollas crudas sin despeinarse y ha permanecido más de 700 horas sentada, mirando a los ojos a personas en el MoMa, sin hablar... y otras tantas que no nombro y que os aseguro, ninguna tiene desperdicio.

Respecto a la anecdota que ocurrió en una de sus obras y que voy a publicar de ella, estuve pensativa varios días y no dejaba de preguntarme.

Cuando terminas una relación de amor...

¿Es eterno el amor que sientes hacia una pareja o persona con la que has compartido todo? ¿Es para siempre?

¿Un pedacito de tu corazón le pertenece, aunque nunca más cruces una palabra con él, aunque no lo vuelvas a ver?

¿Se pierde ese sentimiento o nunca dejas de querer a esa persona?

Mi pregunta está ahí. ¿Es amor o que sentimiento es, el que parece que nunca desaparece?

Os dejo una de sus obras como os he comentado antes y este video en concreto, para mí, uno de los momentos más bonitos y llenos de sentimiento (a rebosar) que he visto en mi vida. Es muy emocionante, primero te deja extrañada, luego perpleja, luego te emociona muchísimo y finalmente te quedas como desorientada.

Una mirada puede decir tanto, el corazón habla con la mirada. Es sencillamente maravilloso.

Aquí os pongo una pequeña introducción para que entendáis mejor el video.

IMPRESIONANTE.

¿Qué pasaría si te reencontraras con un viejo amor o porque no, el amor de tu vida, 23 años después?

En los años setenta, la artista serbia Marina Abramovic mantuvo una intensa relación de amor con su pareja, el alemán Ulay.

Pasaron varios años juntos, realizando toda clase de performances por el mundo. En 1988, cuando su relación ya no daba para más, llevaron a cabo su última acción, titulada Los Amantes. Cada uno caminó 2.500 kilómetros desde lados opuestos de la Gran Muralla China hasta encontrarse en el medio, abrazarse y no volver a verse nunca más.

23 años después, cuando Marina Abramovic ya era una artista consagrada, el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) le dedicó una retrospectiva a su obra denominada The Artist is Present (La Artista está Presente). Dentro de la misma, Marina compartía un minuto en silencio con cada extraño que se sentaba frente a ella.

Ulay llegó sin que ella lo supiera, y esto fue lo que pasó.

http://www.youtube.com/watch?v=OS0Tg0IjCp4

UNA MIRADA VALE MÁS QUE MIL PALABRAS...

Recomiendo ampliamente el documental "Marina Abramovic. The artist is present", dirigido por Matthew Akers y Pier Dupre, una producción de HBO Documentary Films para televisión, no perdáis la oportunidad de verlo y disfrutarlo.

"Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos." (Julio Cortazar)

¡ESTA FRIKA-FAN DE ESTA ARTISTAZA OS DESEA UNAS FELICES VACACIONES!